Objetos Cercanos NEO

Hallan el asteroide número 10.000 cerca de la Tierra


Los astrónomos ya han detectado 10.000 objetos –asteroides y cometas- que se encuentran próximos a la Tierra, los llamados NEO ó Near Earth Objects, es decir los Objetos Cercanos a la Tierra. El último, un asteroide hallado el pasado 18 de junio, ha sido nombrado 2013 MZ5.

Este cuerpo celeste, que mide 300 metros de diámetro, no tiene una trayectoria peligrosa para la Tierra, según la NASA.

El asteroide fue descubierto mediante el telescopio Pan-STARRS-1, gestionado por la Universidad de Hawái, informó la agencia espacial estadounidense.

Los objetos próximos a la Tierra –aquellos que se acercan a nuestro planeta a una distancia de 45 millones de kilómetros o menos– están en el foco de la atención de los científicos, quienes estudian si hay una amenaza potencial de impacto.

La Tierra coexiste con un enjambre de asteroides de distintos tamaños. En los últimos 15 años, tras una serie de búsquedas –algunas financiadas por la NASA–, ha sido detectado un 95% de objetos cercanos a la Tierra cuyo diámetro es mayor de un kilómetro y sus trayectorias están calculadas.

Pero a medida que desciende la escala de tamaño, estos objetos se hacen más numerosos y más difíciles de detectar.

Hasta el momento sólo ha sido detectado un 30% de los asteroides mayores de 140 metros de diámetro, o sea, aquellos considerados generalmente lo suficientemente grandes como para arrasar una ciudad entera.






Cometas , meteoritos y asteroides, conoce las diferencias

En el espacio existen una gran cantidad de cuerpos celestes, muchos de estos pasan cerca de la Tierra y los podemos ver a simple vista. Es común escuchar de ellos en las noticias (cuando anuncian que un meteorito fue encontrado en algún lugar o que algún cometa pasara cerca pronto y podremos verlo) , sin embargo ¿ Sabemos realmente qué es un cometa, un meteorito y un asteroide? , conozcamos un poco más sobre ellos.


Los Meteoroides

En primer lugar tenemos a los meteoroides, estos son objetos celestes menores a los 50 metros de diámetro, por lo cual son más pequeños que los asteroides, una gran parte de estos se han formado a partir de restos de asteroides y cometas, u otras colisiones de objetos celestes en el espacio. Cuando un meteoroide ingresa en la atmósfera de un planeta se empieza a calentar muy rápidamente tras lo cual empieza a vaporizarse, el gas que se desprende queda como rastro de su trayectoria y adquiere cierto brillo, a este rastro brillante se le denomina “meteoro” , también conocido comúnmente como estrella fugaz. En algunos casos los meteoroides no se evaporan por completo, a los restos que impactan contra la superficie del planeta se les denomina “meteoritos”.


Los Asteroides

Estos cuerpos celestes son más grandes que los meteoroides y más pequeños que un planeta, orbitan alrededor del sol, la mayoría de los asteroides del sistema solar se encuentran orbitando entre la Marte y Júpiter, y conforman el cinturón de asteroides del sistema solar. Se estima que en un futuro se podría aprovechar el material existente en los asteroides cercanos a la Tierra, debido a que contienen una gran cantidad de agua y metales como cobalto, platino, níquel y hierro, según ciertas investigaciones respecto a la factibilidad de extraer material de un asteroide, por cada tonelada de material invertida en la construcción de las naves, se podría recuperar mil toneladas de material de los asteroides.


Los Cometas

Son cuerpos celestes compuestos principalmente de hielo , rocas y polvo, orbitan alrededor del sol con trayectorias elípticas muy excéntricas ( órbitas muy alargadas ) , en las cuales tienen un periodo de exposición muy cercano al sol seguido de otro periodo muy lejano al sol, las altas temperaturas provocan que parte de su material se sublime ( pasan de estado sólido a gaseoso directamente ), al sublimarse expulsan al exterior del cometa polvo ( que se produce por la explosión de los pequeños fragmentos de roca ) , y en su conjunto conforman una atmósfera a la que se le denomina “coma” , la cual rodea al cometa , cuando el cometa pasa cerca al sol los vientos solares afectan la coma del cometa y se forma la cola del cometa. Los cometas terminan perdiendo todo su material volátil ( el material que se puede convertir en gaseoso ) luego de pasar cerca del sol repetidas veces, tras lo cual se convierten en asteroides.






Los más observadores habrán notado que en algunas imágenes o fotos de cometas se aprecia que algunos tienen dos colas, con distintas direcciones , una cola es amarilla brillante, mientras que la otra es azul y mucho más tenue, Esto ocurre porque la atmósfera del cometa está formada por gases y polvo , el gas presente en la cola es más liviano que el polvo , por lo cual prácticamente no presenta resistencia ante el viento solar y su dirección es contraria a la del viento solar, esta es la cola azul, en cambio, los fragmentos polvo oponen algo más de resistencia, y por eso la cola que conforman es opuesta al viento solar pero con una ligera curva, que corresponden a la cola amarilla brillante, el color se debe a que las partículas de polvo reflejan la luz solar.



Restos de la nube de polvo de estrellas en la que se creó el Sistema Solar

Hace 4.600 millones de años el Sol y los planetas se formaron en una nube de polvo de estrellas, y de ese cúmulo primigenio nacieron también los asteroides y los cometas, pedazos sobrantes de la concepción del Sistema Solar. Este viernes al menos 950 personas resultaron heridas a causa de la caída de un meteorito en la región rusa de los Montes Urales, un ejemplo de lo que sucede cuando uno de esos cuerpos celestes errantes se cruzan en el camino de nuestro planeta. Considerados los restos de los materiales que dieron origen a los planetas, los asteroides y los cometas contienen información muy valiosa sobre los pasos intermedios en la formación del sistema solar, ha explicado el científico del Csic Pedro José Gutiérrez, del Instituto de Astrofísica de Andalucía. 

La diferencia más básica entre ellos es que los cometas están más lejos del centro del sistema solar y contienen hielo, mientras que los asteroides son rocosos, como los planetas más cercanos al Sol. La mayoría orbita en el 'cinturón de asteroides' situado entre Marte y Júpiter, un ancho disco de polvo y rocas que, según se cree, no pudo convertirse en planeta debido a la fuerte gravedad del gigante Júpiter. Las fuerzas producidas por la interacción con la gravedad de los planetas también son culpables de que algunos asteroides se salgan del cinturón, lanzados hacia la parte interna del sistema solar, como 2012 DA14 que la noche del viernes pasa cerca de la Tierra. 






500.000 objetos navegando por el sistema solar 

Se estima que existen unos 500.000 objetos como el DA14, de unos 50 metros de diámetro, navegando por el sistema solar. Lo más probable es que su periplo estelar acabe en el Sol, en algún otro cuerpo que se cruce en su camino —como un planeta—, o que escapen, ha indicado Gutiérrez.

Mucho más lejos que el cinturón de asteroides está el cinturón de Kuiper y la Nube de Oort, las remotas regiones del sistema solar de las que proceden los cometas, ha explicado Juan Antonio Bernedo, jefe técnico del Planetario de Madrid. Cuando por alguna perturbación un cometa "cae" hacia el Sol, la materia helada que contienen se convierte en gas, y se forma la característica "cola" de los cometas, larga y brillante, ha comentado Bernedo. Según algunas teorías, los cometas podrían haber traído a la Tierra agua y compuestos orgánicos, las partículas primordiales de la vida. 


Lo importante es "tenerlos localizados" 

Científicos y astrónomos aficionados rastrean constantemente el cielo para tener localizados los llamados 'NEO' (Near Earth Objects), objetos celestes —tanto cometas como asteroides— con una órbita próxima a la de la Tierra. Según los últimos datos de la Agencia Espacial Europea, se conocen 9.600 de ellos.

El objetivo es que no nos suceda como a los dinosaurios, que perecieron hace 65 millones de años presumiblemente por el impacto de un asteroide o cometa de 10 kilómetros de diámetro que impactó en la zona de la península del Yucatán, en México, que provocó  la conocida como extinción del Cretácico-Terciario. Ningún meteoro así va a caer en un futuro próximo sobre nuestro planeta, pero los científicos seguirán estudiando a fondo estos navegantes estelares, para ahorrarnos sorpresas y para conocer más sobre el origen de nuestro Sistema Solar.






Por qué deben preocuparnos los impactos de asteroides y cometas

En el mes de febrero de 2013 una lluvia de meteoritos dejó cientos de heridos en Rusia, rompiendo ventanas y dañando edificios. Más tarde en el mismo mes el asteroide 2012 DA14 pasó muy cerca de nuestro planeta, a una distancia de tan solo 28.000 kilómetros.
Estos dos eventos, no conectados, ponen en evidencia los peligros que suponen los restos de materiales cósmicos. 


¿Cuáles son los riesgos?

El 2012 DA14 no implica ningún peligro, pero ¿que pasaría si una roca de similar tamaño fuese a golpearnos?
No sabemos con seguridad de qué está hecho el 2012 DA14. Pero los asteroides que miden menos de 100 metros de diámetro y están hechos de material rocoso, pueden romperse en la atmósfera.

Datos desclasificados de satélites militares estadounidenses (diseñados para monitorear posibles pruebas nucleares) muestran que muchas de estas rocas se pueden quemar antes de llegar a la Tierra.
Pero, ocasionalmente, uno de estos fenómenos se puede dar lo suficientemente cerca del planeta como para causar daños considerables.
En 1908, un asteroide o un cometa que medía decenas de metros de diámetro se desintegró a unos 10 kilómetros sobre Siberia. La explosión afectó a unos 80 millones de árboles en un área de 2.000 kilómetros cuadrados cerca del río Tunguska, por suerte una región poco habitada.

Una teoría propone que le objeto que explotó en Siberia era un fragmento del cometa Encke. Esta bola de hielo y polvo fue responsable de una lluvia de meteoritos llamada Beta Taurids, que se desplomó sobre la atmósfera de la tierra a finales de junio y julio, la misma época en la que se dieron los eventos del río Tunguska.

Estos objetos son tan solo grandes amalgamas de roca o metal. ¿Por qué tienen efectos tan destructivos?






Las pequeñas rocas o meteoritos que caen sobre nuestro planeta continuamente viajan muy rápido, puede que a decenas de kilómetros por segundo. Pero, como se ha mencionado ya, la mayoría se desintegran antes de llegar a la Tierra.
Para aquellas rocas que pesaban más de unos cuantos cientos de toneladas, sin embargo, la fricción atmosférica tiene poco efecto en sus velocidades. Una roca con tal cantidad de masa viajando a tal velocidad desprende una enorme cantidad de energía cuando golpea a la superficie del planeta.
Esto sucede porque la energía cinética de la roca espacial es el producto de la mitad de la masa y el cuadrado de la velocidad. En otras palabras, si doblas la velocidad del objeto, su energía cinética se incrementará por un factor de cuatro.


¿Qué tan grandes pueden llegar a ser?

El asteroide que pasará cerca de nuestro planeta es un "enano" comparado con otros fragmentos de material cósmico.
El impacto que provocó la desaparición de los dinosaurios hace 65 millones de años fue probablemente causado por un objeto de unos 15 kilómetros de ancho.
La roca espacial atravesó la atmósfera y cayó en la península de Yucatán, en México. Los científicos estiman que la energía explosiva liberada en el impacto fue equivalente a 100 trillones de toneladas de TNT, miles de millones de veces mayor que las bombas atómicas que cayeron en Hiroshima y Nagasaki.
El enorme cráter que queda como evidencia mide unos 180 kilómetros de diámetro.


¿Cuánto sabemos de lo que hay allí afuera?

Hay un número de organizaciones alrededor del mundo que se dedican a catalogar los objetos potencialmente peligrosos que nos rodean. Uno de ellos es el programa de Objetos Cercanos a la Tierra (NEO, por sus siglas en inglés) de la agencia espacial estadounidense NASA, que administra y financia la búsqueda, estudio y vigilancia de asteroides y cometas cuyas órbitas los traen periódicamente cerca de la Tierra.
En 1998 la NASA empezó a compilar un inventario de rocas espaciales de más de un kilómetro de diámetro. Pero en 2005 la agencia se planteó el más difícil objetivo de catalogar objetos de hasta 140 metros de diámetro. Aspira a encontrar el 90% de todos ellos antes de 2020.
Pero el cercano vuelo del 2012 DA14, el meteorito que golpeó Rusia y la próxima llegada del cometa Ison en noviembre muestran que todavía nos quedan muchos detalles por conocer.






¿Qué podemos hacer si los astrónomos detectan un asteroide que se dirige a nuestro planeta?

Una de las estrategias más comentadas para el caso de que un asteroide se dirija a la Tierra –puesta en práctica por Bruce Willis en la película Armagedón- es detonar un arma nuclear contra el objeto espacial.
Con ello se espera que se pudiera desviar de trayectoria el asteroide y salvar nuestro planeta.
Otra estrategia sería estrellar una nave espacial contra el asteroide. La Agencia Espacial Europea ha diseñado una misión llamada Don Quijote que quiere estudiar los efectos de una colisión de este tipo.
Con más tiempo, se podría enviar una nave para interceptar el asteroide y con la potencia de sus motores, desviarlo poco a poco de su trayectoria.
Otra opción que se ha barajado es apuntar rayos láser contra la roca.
Una estrategia más sorprendente sería disparar pelotas de pintura reflectante para aumentar la reflectividad del objeto. La presión de las partículas de luz reflejadas sobre la pintura, podría con el tiempo desviar la trayectoria del asteroide.


¿Cómo podemos observar el paso del 2012 DA14?

Este asteroide de 45 metros de diámetro no es lo suficientemente brillante como para que se pueda ver a simple vista, pero se podrá observar con unos buenos binoculares entre las 1800 y las 2200 GMT.
Los mejores lugares de observación se encuentran en Europa, Australia y Asia, no así desde el hemisferio occidental por lo cual será dificultosa la observación desde América.